Santana hace olvidar un amargo recuerdo a los Mets (24/marzo/2008)
¿Cómo cicatrizar una herida tan dolorosa como la que los Mets sufrieron con su humillante colapso en la recta final de la pasada temporada?
El antídoto para la depresión para el equipo de Nueva York fue la contratación del mejor pitcher del momento: Johan Santana.
Fue un fichaje que recién en enero se pudo concretar, obra de la paciencia e ingenio del gerente general Omar Minaya. Los Mets no asomaban entre los favoritos por los servicios del as venezolano, luego que los Mellizos de Minnesota empezaron a buscarle un destino ante la incapacidad del club de satisfacerle sus exigencias de salario.
A los Mets les costó un contrato de 137.5 millones de dólares y seis temporadas, uno que marca hitos para pitchers, y sin tomar en cuenta del pelotón de prospectos que cedieron a Minnesota.
Pero cada dólar lo vale. Ganador de dos premios Cy Young, Santana promedia 18 victorias y 246 ponches en las últimas cuatro temporadas.
Y los Mets pueden relamarse por su cambio de circuitos. La Liga Nacional está por detrás de la Americana en cuanto a despliegue ofensivo, las dimensiones del espacioso estadio de los Mets favorece a los lanzadores y Santana tendrá el bono de enfrentar a pitchers que tienen que ir a batear.
Su adquisición altera la elaboración de pronósticos en la División Este, donde previamente los Filis de Filadelfia eran favoritos para repetir. Con Santana a bordo, más una ofensiva que incluye a José Reyes, Carlos Beltrán y David Wright, los Mets llevan las de ganar y aspirar a su primer campeonato de Serie Mundial desde 1986 en su último año en el Shea Stadium.
El equipo de Queens tiene la imperiosa necesidad de reconciliarse con su afición, luego de dejar escapar el título de la división, obsequiándoselo en bandeja a los Filis, al malograr una ventaja de siete juegos cuando sólo les quedaba 17 por disputar, privados de participar en los playoffs.
"Fue una de esas cosas extrañas que sólo pasan en el béisbol, y lo mejor es dejarlo todo en el pasado", dijo Santana sobre la debacle. "Ese era un equipo que me parecía que tenía algo especial y yo sigo pensando que aún lo tiene. Mi enfoque será conseguir mi anillo de campeón".
Santana tendrá seis años para conseguirlo, pero hay varios Mets quienes tendrán más premura.
A Pedro Martínez, Carlos Delgado, Orlando Hernández y Moisés Alou les queda un año de contrato.
En términos generales, este en club casi sin fisuras y completo de arriba a abajo.
Santana (15-13, 3.33 de efectividad) liderará una rotación que también incluye a John Maine y al zurdo mexicano Oliver Pérez, quienes tuvieron idénticas fojas de 15-10 y efectividad abajo de cuatro en 2007.
También confían en que el dominicano Martínez (3-1, 2.57 en cinco salidas en septiembre), plenamente recuperado de una lesión, vuelva por sus fueros y se sienta con menos presión de cargarse al equipo sobre los hombros por la presencia de Santana.
El cubano Orlando Hernández (9-5, 3.72) se perfila como el quinto, pero no habría que extrañarse si el derecho Mike Pelfrey (3-8, 5.57) sea tomado en cuenta.
En el bullpen, el cerrador Billy Wagner viene de una campaña con 34 rescates pero su efectividad se disparó tras la pausa por el Juego de Estrellas, de 1.64 a 3.90. Aaron Heilman y el puertorriqueño Pedro Feliciano figuran como los preparadores. Si el dominicano Duaner Sánchez logra recuperar el nivel que tenía antes de la lesión que lo apartó en 2006, el relevo de los Mets podría dar muchas más garantías.
Fabricar carreras no es mayor poblema.
El jardinero central boricua Beltrán (.276, 33 jonrones y 112 remolcadas) apenas está en el apogeo de su carrera, mientras que el torpedero dominicano Reyes (.280, 12, 57 y 78 robos), y el tercera base Wright recién despuntan (.325, 30, 107).
Wright fue de los pocos que no tiró la toalla durante el descalabro de septiembre, al batear para .352 y su nombre suele aparecer con frencuencia en la discusión de un futuro Jugador Más Valioso.
Reyes fue la otra de la cara de la moneda. De un inicio de campaña sensacional, el quisqueyano terminó soportando abucheos y hasta fue criticado por el piloto Willie Randolph por no correr tras conectar roletas.
Pero las lesiones y la avanzada edad de varios titulares son fuente de inquietud. El primera base Delgado arrastra una molestia en la cadera, el jardinero izquierdo Alou se perderá los primeros meses por una hernia y Beltrán viene de operarse ambas rodillas.
El boricua Delgado viene de una campaña que fue la sombra de su prolífica carrera, en la que su promedio de slugging mermó 100 puntos con respecto al año pasado, y tampocó alcanzó los habituales 30 jonrones y 100 carreras producidas. Bateó para .258 con 24 vuelacercas y 87 remolcadas.
Al intermedista dominicano Luis Castillo (.301, 1, 38 con los Mellizos y Mets) le ayuda jugar ahora en un estadio Shea con césped natural, pero sus viejos problemas en las piernas nunca dejan de inquietar.
Las lesiones son también el eterno problema de Alou, quien en julio cumplirá 42, pero cuando está disponible produce. El año pasado hilvanó una racha de 30 juegos bateando de hit, al acumular promedio de .341 con 13 jonrones y 49 remolcadas en 87 partidos.
El jardinero derecho Ryan Church ( .272, 15, 70) y el catcher Brian Schneider (.235, 6, 54) son las dos caras nuevas de la alineación. Ambos llegaron en el canje que envió al prospecto Lastings Milledge a los Nacionales de Washington.