La Biblia dice que la iglesia, o sea nosotros, somos el cuerpo de Cristo y que Él es la cabeza de ese cuerpo. (EFESIOS 5:23) Pero que pasa cuando en la Igle todos quieren ser cabeza....
Cada uno de nosotros debe cumplir una función en el cuerpo de Cristo que es la Iglesia. Algunos enseñan, otros predican, otros oran intercediendo por los demás, algunos visitan a los enfermos, enseñan a los niños, etc.
Cada uno en su lugar... Cada uno es importante aunque no sea cabeza y sea pie, o brazo, o lo que sea... Y no por eso va a ser menos importante...
Todos somos importantes para Dios.
El Espíritu puede expresarse mediante diferentes dones, y El nos ha capacitado con esta variedad de dones, justamente porque hay muchas cosas para hacer, no necesitamos competir con nadie, ni envidiar a nadie por la posición en que Dios le ha puesto...
A El sea la gloria... Gracias por dar tu vida por nosotros en la cruz del calvario para que hoy formemos parte del cuerpo de Cristo. Tu Iglesia.-
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